1. Desmontar la puerta y ponerla en una mesa de trabajo cómoda. Quitar la junta antigua. Medir la longitud de la junta vieja y cortar sobre medida la junta nueva.

Atención, ambos extremos de la junta nueva tienen que quedar perfectamente juntos, para mantener la estanqueidad de la estufa. Nuestros técnicos miden la longitud, ponen una cinta negra en el punto del corte y después cortan la junta. La unión de los dos extremos de la junta se ponen en la parte baja para evitar que la unión se pueda ver lateralmente a través del cristal.

2. Limpiar el alojamiento donde se debe pegar la junta nueva. Nuestros técnicos usan un cepillo de latón para el taladro (si el cepillo el muy grande se dañará la pintura de la puerta (tenemos la pintura original de las estufas piazzetta como respuesto).

3. Limpiar residuos de polvo, de silicona antigua u otros residuos.

4. Poner un cordón de silicona especial anticalórica que incluimos en el pack a todo el alojamiento. Cuidado de hechar demasiado, para que no salga la silicona hacia afuera.

5. Apoyar la junta encima de la silicona. Poner una poquísima cantidad de silicona en la unión de los dos extremos para garantizar la estanquidad.

Se aconseja poner un trozo de cinta aluminio en la unión. Esto evita que la silicona no se pegue al monobloque. Si se pega al monobloque se acabaría despegando toda la junta.

Se aconseja dar algunos golpes ligeros con un martillo en las esquinas para distribuir la silicona en la junta, de modo que cuando se cierra la puerta, la junta no se agrupe en una sola posiciòn sino que quede bien distribuida.

Poner cinta de carrocero adhesiva a la toda la junta. Esto se hace por si hubiera alguna zona con mucha silicona, para que no se pegue al monobloque. También puede poner papel de periodico pegado con cinta aislante.

6. Montar la puerta, cerrarla y dejarla cerrada 24 horas para que la silicona pueda secar correctamente, no usar la estufa durante ese periodo de tiempo.

7. Verificar que la junta se haya pegado correctamente a la puerta.